Amazon desvela las antenas de la futura red del proyecto Kuiper

antena para acesso à rede de internet via satélite da Amazon

marzo 27, 2023

Durante una conferencia del sector de los satélites celebrada recientemente en Washington D.C. (Estados Unidos), Amazon desveló por primera vez tres modelos de antena del proyecto Kuiper, su futura constelación de satélites de órbita baja (LEO). Los detalles del proyecto se anunciaron en noviembre de 2021, cuando la empresa reveló que su objetivo es proporcionar un acceso rápido al ancho de banda a comunidades desatendidas y subatendidas de todo el mundo.

Para utilizar el servicio, será necesario instalar una antena externa (terminal) para comunicarse con los satélites. Según Amazon, estos equipos han sido tradicionalmente demasiado grandes, complejos y caros, lo que ha obstaculizado las iniciativas encaminadas a reducir la brecha digital.

En el acto, Amazon presentó tres modelos de terminal de bajo coste con los que prevé dar servicio a decenas de millones de clientes. El ambicioso objetivo es tener un terminal cuya construcción cueste menos de 500 dólares, utilizando una arquitectura más pequeña y ligera que los diseños tradicionales. El equipo de ingenieros de Amazon sigue trabajando para que estos dispositivos sean aún más pequeños, asequibles y con más funciones.

La antena estándar del Proyecto Kuiper mide menos de 11 pulgadas (27,94 cm) cuadradas y 1 pulgada (2,54 cm) de grosor. Pesa menos de dos kilos sin el soporte de montaje. Puede ofrecer velocidades de hasta 400 megabits por segundo (Mbps) y el coste de producción previsto por Amazon es inferior a 400 dólares cada una.

El diseño de antena más pequeño mide 7 pulgadas (17,78 cm) cuadradas, pesa sólo media libra y garantiza velocidades de hasta 100 Mbps. El modelo puede servir tanto a clientes residenciales que busquen un menor coste como a administraciones públicas y empresas con aplicaciones centradas en la movilidad terrestre y el Internet de las Cosas (IoT).

El tercer modelo está dirigido a demandas de ancho de banda más exigentes. Mide 19 por 30 pulgadas y ofrece velocidades de hasta 1 gigabit por segundo (Gbps).

Los terminales del Proyecto Kuiper utilizan un chip diseñado por Amazon, cuyo nombre en clave es Prometheus, que combina la potencia de procesamiento de las tarjetas 5G de los teléfonos inteligentes, las capacidades de una estación base celular para gestionar el tráfico de miles de clientes a la vez y la capacidad de una antena de microondas backhaul para soportar conexiones punto a punto. Prometheus también se utiliza en los propios satélites y antenas terrestres del Proyecto Kuiper, y puede procesar hasta 1 terabit por segundo (Tbps) de tráfico en los bordes de cada satélite, según Amazon.

La empresa tiene previsto lanzar los dos primeros satélites prototipo en el primer semestre de 2024 en el vuelo inaugural del cohete Vulcan Centaur de United Launch Alliance (ULA). La misión ayudará a los ingenieros del proyecto Kuiper a obtener datos reales sobre el rendimiento de los sistemas en el espacio y a probar la red de comunicaciones de extremo a extremo. Paralelamente, Amazon está iniciando operaciones a escala para ofrecer servicios comerciales. Los primeros clientes deberían tener acceso al servicio a finales de 2024.

A tiempo: a principios de 2022, SpaceX, de Elon Musk, presentó unos satélites LEO que prometen mayores velocidades y tasas de transferencia más elevadas por un precio único de 2.500 dólares por el hardware y otros 500 al mes por el servicio. Los modelos básicos de Starlink, por su parte, cobran unos 500 dólares por el hardware y 100 dólares al mes por el servicio.

Un mercado en expansión y controvertido

Los satélites de órbita terrestre baja (LEO) pueden revolucionar Internet y dar a millones de personas de comunidades remotas y rurales que aún no están conectadas la posibilidad de acceder al mundo en línea. Las cifras de la Unión Internacional de Telecomunicaciones muestran que 2.900 millones de personas seguirán sin conexión en 2021, el 96% de ellas en países en desarrollo.

Dadas estas cifras, es de esperar una carrera por los satélites LEO. La Unión Europea (UE), por ejemplo, anunció recientemente planes que implican un sistema de satélites LEO de 6.000 millones de euros para garantizar un mejor acceso de banda ancha a la región. El proyecto forma parte de los esfuerzos por reducir la dependencia de empresas extranjeras y proteger de interferencias exteriores los servicios clave de comunicaciones y datos de vigilancia.

Con fuertes inversiones en esta disputa, SpaceX  ofrece servicios en decenas de países de todos los continentes, con más de 2.000 satélites funcionales orbitando en el cielo. Existe controversia en torno al crecimiento de la constelación Starlink de Musk. Miembros de la comunidad científica han expresado su preocupación por el creciente impacto de los satélites en la visibilidad del cielo nocturno. Además, los competidores de SpaceX han iniciado disputas regulatorias en un intento de frenar el impulso de Starlink.

A modo de comparación, OneWeb,, uno de los competidores de SpaceX cuyos principales patrocinadores son el gobierno británico, la india Bharti Enterprises y la francesa Eutelsat, tiene 350 satélites en órbita y planea duplicar su constelación, lo que supone un número mucho menor que Starlink.