Más de 10.000 satélites activos en órbita

Here we are: this month we passed the milestone of 10,000 active satellites in orbit.

julio 01, 2024

Recientemente se ha alcanzado un hito en el panorama espacial de la Tierra. El pasado mes de junio se superó la marca de los 10.000 satélites activos en órbita. La empresa Look Up Space, que desarrolla y mantiene una red mundial de radares de detección y seguimiento de objetos en órbita terrestre, contabilizó exactamente 10.019 satélites activos, dos tercios de los cuales (6.646) pertenecen a la constelación Starlink de SpaceX. La mayoría (9.254) de estos satélites se encuentran en órbitas bajas, principalmente entre 400 y 1.200 kilómetros sobre la superficie terrestre.

Además, se han identificado unas 3.200 etapas de cohetes y 13.326 fragmentos en órbita alrededor de la Tierra. Esto representa sólo una pequeña fracción de los restos actualmente desaparecidos, que deben rondar el millón de piezas de un centímetro o más. Según Look Up Space, su plataforma de datos Synapse detecta diariamente riesgos de casi mil colisiones con probabilidades superiores a una entre un millón y del orden de 50 y 100 colisiones con probabilidades superiores a una entre 100 mil.

Constelación china

Por si fuera poco, a principios de agosto se lanzarán los primeros satélites de la megaconstelación china G60 Starlink, con más de 12.000 unidades previstas, según el sitio web Shanghai Securities News. Se espera que la misión prevista para el 5 de agosto lleve 18 satélites, y el vehículo de lanzamiento debería ser el Long March 6A debido a sus características, aunque la información aún no ha sido confirmada.

La constelación G60 Starlink está gestionada por Shanghai Spacecom Satellite Technology (S SST) y su objetivo es proporcionar acceso global a Internet, en contraste con los proyectos estadounidenses, incluido el Starlink de SpaceX. El pasado febrero, SSST anunció que había recibido una aportación de 933 millones de dólares para fabricar la constelación.

Según el sitio web EurasianTimes, los planes iniciales del proyecto G60 eran desarrollar no tanto una constelación como una agrupación de satélites de Internet, es decir, un grupo de satélites que colaboraran en una región espacial para llevar a cabo diversas misiones. El nombre G60 procede de la autopista del mismo nombre que atraviesa varias ciudades de la región del delta del río Yangtsé.

Está previsto que en 2024 se lancen otros 108 satélites G60 Starlink, en otros cinco lotes de 18 unidades.

Otra megaconstelación china está en desarrollo, pero aún sin satélite lanzado. El proyecto Guo Wang se creó en 2021, está dirigido por la empresa SatNet y también se considera otra respuesta china al Starlink de SpaceX. Se espera que la constelación sume hasta 13.000 satélites.

Preocupação no ar

Preocupación en el aire Podemos decir que, desde hace algunos años, el despliegue de megaconstelaciones de satélites, como el Starlink de SpaceX y los competidores chinos, así como proyectos en curso de menor envergadura, crecen de la mano de la preocupación de la comunidad científica y otros colectivos.

Entre los astrónomos, por ejemplo, las preocupaciones están relacionadas con el efecto de deslumbramiento y la contaminación espacial causada por la presencia de satélites en órbita terrestre baja que contaminan las observaciones astronómicas.

Los expertos en seguridad de los vuelos espaciales también advierten del riesgo de colisiones en la órbita terrestre debido a las megaconstelaciones. Además, algunos científicos temen que el volumen de metal quemado al desorbitar los satélites al final de su vida útil pueda provocar cambios imprevisibles en el clima y el campo magnético del planeta.

Otro motivo de preocupación es la falta de directrices internacionales sobre el impacto de los objetos puestos en órbita por actividades humanas, lo que aumenta las incertidumbres en torno a las megaconstelaciones de satélites.

Por ejemplo, el año pasado se produjo un incidente que causó polémica en torno a esta cuestión, en particular en relación con los riesgos de caída de restos de satélites. En octubre de 2023, SpaceX, responsable de la mayor constelación de satélites actualmente en funcionamiento, pidió a la Administración Federal de Aviación estadounidense (FAA) que corrigiera un informe enviado al Congreso en el que se advertía de que, para 2035, la caída de restos de satélites en órbita terrestre baja podría herir o matar a alguien cada dos años si las constelaciones se desplegaban según lo previsto. El argumento subyacente a la petición de SpaceX era que el informe se basaba en “análisis profundamente erróneos” basados en suposiciones y estudios obsoletos.