La comunicación marítima por satélite se duplicará con creces en 10 años

leo satellites

julio 20, 2024

El mercado de las comunicaciones marítimas por satélite experimentó un importante crecimiento el año pasado, impulsado principalmente por la entrada en él de Starlink. Además, según el último informe de Novaspace, empresa de consultoría e inteligencia de mercado en el sector espacial, se prevé que la cuota de mercado de las soluciones de órbita no geoestacionaria (NGSO) como principal método de comunicación marítima crezca del 20% en 2023 al 90% en 2033.

El estudio también muestra que el número total de buques que utilizaban al menos un servicio de comunicación por satélite en 2023 era de 40.600. Se espera que esta cifra se duplique en 10 años y alcance los 90.000 buques en 2033. Se espera que esta cifra se duplique con creces en 10 años, alcanzando alrededor de 90.000 buques en 2033.

Aunque han sido cautos y han decidido no depender únicamente de las soluciones de conectividad NGSO, los operadores de grandes buques adoptan cada vez más un enfoque híbrido, utilizando soluciones de órbita geoestacionaria (GEO) como complemento de los servicios NGSO, destaca el estudio de Novaspace. La estrategia aumentó temporalmente los presupuestos de los operadores para satélites en 2023, pero las cifras deberían normalizarse a medida que disminuya el coste de propiedad de las soluciones satelitales.

Otra revelación de la investigación es que la utilización del ancho de banda se duplicó el año pasado, debido sobre todo a la entrada de Starlink. Se prevé que crezca exponencialmente de 138 Gbps en 2023 a 1,7 Tbps en 2033 (un aumento de 13 veces). La dependencia de los sistemas GEO como principal medio de comunicación disminuirá a medida que los buques pasen a soluciones NGSO capaces de satisfacer las demandas primarias de ancho de banda. En consecuencia, se espera que la cuota de mercado de los sistemas NGSO aumente del 66% en 2023 al 96% en 2033.

Según Novaspace, la nueva generación de sistemas NGSO presionará al ecosistema actual, haciendo bajar los precios y aumentando la oferta de capacidad. Se prevé que los ingresos de los operadores pasen de algo menos de 620 millones de dólares en 2023 a unos 1.140 millones en 2033, con una tasa de crecimiento anual compuesto del 6% a lo largo de la década.

Además, se espera que los ingresos por servicios ofrecidos al mercado marítimo aumenten de 1.800 millones de dólares en 2023 a 3.000 millones en 2033. El crecimiento se atribuirá al creciente número de buques equipados con VSAT y a los mayores ingresos medios por usuario (ARPU) en determinados subverticales. Se espera que la cuota de mercado de los ingresos por servicios generados por las soluciones NGSO aumente del 17% en 2023 al 87% en 2033.

Comunicación LEO

El sector marítimo adopta cada vez más sistemas de comunicación por satélite, en particular tecnologías de órbita terrestre baja (LEO) como Starlink de SpaceX. Según una encuesta realizada entre 73 armadores por Thetius, consultora que ayuda al sector marítimo a tomar decisiones tecnológicas, el 43% de los encuestados tiene previsto implantar este tipo de comunicación en los próximos 12 meses. Según el estudio, ya hay 7.000 buques equipados con funciones de conectividad LEO.

La creciente demanda es el resultado del importante aumento del uso de datos en el transporte marítimo. Según las cifras de la encuesta de Inmarsat citadas en el estudio de Thetius, entre 2021 y 2022 se produjo un crecimiento del 207% y del 146% en los segmentos de contenedores y graneles.

El sitio web Maritime Executive cita ejemplos de cómo se espera que la conectividad LEO repercuta de diversas maneras en el sector del transporte marítimo. Con capacidades de comunicación avanzadas, será posible explotar diversos aspectos de la digitalización avanzada y tecnologías como la Inteligencia Artificial para que las flotas sean más inteligentes y tomen decisiones estratégicas más basadas en datos.

La IA y los sistemas de visión por ordenador podrán ayudar a los buques a navegar, vigilar las condiciones meteorológicas y ayudar a la tripulación a tomar decisiones para garantizar una navegación segura y eficiente. Los sensores del Internet de las Cosas (IoT) podrán vigilar constantemente el entorno marino y ayudar a reducir el consumo de combustible y las emisiones, evitando reducciones de velocidad y maniobras innecesarias.

Los sensores también pueden ayudar al mantenimiento predictivo, ya que permiten analizar datos y predecir mejor los fallos de los equipos, reduciendo así los tiempos de inactividad. El informe Optimal Route de Thetius estima que reducir los tiempos de inactividad imprevistos mediante la supervisión de las condiciones de uso puede aumentar los márgenes hasta un 50%.